Por qué es importante para una startup tener un CTO¿Qué es y cómo se hace la optimización de procesos en las compañías?

Andrew Bosworth, Reginald Henry y Kevin Scott. Tal vez sus nombres no sean conocidos, pero esos profesionales son los responsables de tecnología de los gigantes Meta, Apple y Microsoft, respectivamente. El CTO ('Chief Technology Officer' o director de tecnología en su traducción al español) es una figura clave en esas compañías, pero también en muchas startups. Un estudio de IBM reveló que los CEOs de las compañías más importantes consideran que los CTOs son fundamentales para el éxito de la empresa, sólo superados en importancia por los directores financieros.
Estos profesionales se encargan de desarrollar la estrategia tecnológica y de mantener actualizadas las herramientas de sus compañías con el objetivo de impulsar el negocio y alcanzar los objetivos comerciales. Actualmente, se calcula que alrededor de 50% de las empresas aplican la inteligencia artificial en su negocio, según la consultora McKinsey Digital.
El 'big data', el 'deep learning' o las API (interfaces de programación de aplicaciones) son otras de las tecnologías que están marcando 2023 según BBVA Spark, que acompaña a las empresas de alto crecimiento. Para no quedarse atrás dentro del ecosistema, es recomendable que los emprendedores incorporen un CTO a su startup que impulse la adaptación a las últimas tecnologías.
¿Qué es el CTO de una startup?
El CTO es una de las figuras más importantes dentro de una startup. Este trabajador es el responsable del departamento de tecnologías de la información (TI) y quien se encarga de implementar la estrategia tecnológica de la compañía para concebir o mejorar el producto o servicio que se lanza al mercado.
Aunque el CTO puede llegar a confundirse con el CIO (Chief Information Officer o director de información), ya que comparten tareas y trabajan de manera conjunta, entre ambos roles existe una diferencia fundamental. Mientras el CIO se ocupa de mejorar la eficiencia de la infraestructura y los procesos internos de la compañía, analizando el impacto que podrían tener las nuevas tecnologías si se implementasen, el CTO se encarga de articular estrategias, políticas y procedimientos que puedan reforzar el producto final y hacer crecer el negocio.
¿Qué habilidades debe tener el CTO de una startup?
El CTO es una figura de alta responsabilidad, tanto en las startups como en las empresas ya consolidadas dentro del mercado. Estos profesionales lideran los equipos de tecnología de las empresas, supervisan que se cumplen con los objetivos recogidos en el plan estratégico y se encargan de evaluar los recursos tecnológicos que necesita una empresa. Hay algunos rasgos que deben compartir los CTO de cualquier startup.

Conocimientos tecnológicos. Un CTO debe tener conocimientos y una vasta experiencia. Especialmente, se valora que tengan formación y hayan puesto en marcha proyectos en áreas como el desarrollo de software, la ciberseguridad o las tecnologías de la información.
Capacidad de liderazgo. Los CTO son responsables de equipo y, como tal, deben tener la capacidad para liderar a los profesionales tecnológicos y sacar el máximo partido a sus habilidades y conocimientos. Creando lazos de confianza y respeto, estos profesionales deben dirigir, coordinar, motivar e inspirar a sus empleados para que se sientan parte de la empresa. Es decir, más allá de contar con conocimientos, deben mejorar sus habilidades blandas, conocidas como ‘soft skills’.
Visión de negocio. Gestionar los recursos y presupuestos y elaborar estrategias que sirvan para alcanzar los objetivos comerciales de la empresa, tanto a corto como a largo plazo es otro de los deberes de un CTO. En todo momento, deben ser conscientes de las necesidades de la compañía y desarrollar su trabajo en coordinación con otras áreas para poder impulsar el negocio. Además, deben tener tolerancia a las situaciones de riesgo y capacidad para tomar buenas decisiones y resolver problemas, ya que su trabajo afectará de manera directa a la rentabilidad y productividad de la startup.
Actualización. El CTO de una startup debe actualizar sus conocimientos de manera constante para detectar las nuevas tecnologías que puedan beneficiar a la compañía.
Contar con un CTO dentro de una startup es imprescindible: es quien se encarga de desarrollar toda su estrategia tecnológica para, junto al CEO, lograr que los productos o servicios que ofrecen las compañías estén a la vanguardia.

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¿Qué es y cómo se hace la optimización de procesos en las compañías?

De la optimización de procesos se han escrito cientos y cientos de artículos en los últimos años, pero ¿sabemos exactamente en qué consiste este proceso? ¿Qué es la famosa metodología agile que se nombra en casi todos los artículos sobre optimización de procesos?
¿Qué es exactamente la optimización de procesos de negocio?
Antes de abordar una optimización de procesos de negocio en nuestra compañía, lo primero que tenemos que tener muy claro es en qué consiste exactamente esa actividad, qué es la optimización de procesos y para qué nos va a servir en nuestro caso particular.
Hoy por hoy optimizar los procesos de negocio consiste en automatizar al máximo todos los pasos que conforman el ciclo de producción, distribución, venta, atención al cliente, marketing, publicidad, transporte, etc., de un producto o de un servicio.
Desde este punto de vista, la optimización de procesos de negocio tendría no solo un objetivo, sino varios:
.Hacer frente sin errores técnicos o humanos a los continuos cambios que se producen en el día a día de una compañía (cambios en el mercado, en los gustos, en las tendencias de consumo, en la irrupción de nuevas tecnologías, etc.).
.Aumentar la eficacia y la eficiencia de todos y cada uno de los miembros del organigrama empresarial, desde el primero hasta el último.
.Agilizar al máximo los procesos automáticos y repetitivos que se producen en los distintos trabajos y tareas que ejecutan nuestros equipos de trabajo, bien de forma individual, bien de forma colaborativa.
Metodología agile para optimizar procesos de negocio
La metodología agile se define como un conjunto de técnicas de trabajo creadas para optimizar cada uno de los hitos que conforman un proyecto complejo. La metodología agile surgió a principios del siglo XX para intentar automatizar y agilizar la puesta en marcha de proyectos informáticos y de desarrollo de software y su objetivo es muy claro: perder el menor tiempo posible en cada fase de trabajo, minimizar la incidencia de errores o desviaciones del objetivo (errores humanos, técnicos, administrativos, logísticos, etc.,) y, así, conseguir llegar al objetivo final del proyecto lo más rápidamente posible y con la mejor rentabilidad (económica) posible.
La tecnología como herramienta y medio, no como fin
No nos gustaría terminar este artículo sin aclarar un punto que, creemos, suele quedar poco claro en los artículos y libros escritos sobre la optimización de procesos de negocio. Es sencillo: la tecnología que se utiliza para agilizar los objetivos de un proyecto, minimizar la incidencia de errores y optimizar los recursos de los que disponemos no es el fin último de esa optimización, sino un medio para lograrla. ¿Qué quiere decir esto?
Las metodologías ágiles permiten adaptar la forma de trabajo a las condiciones del proyecto, consiguiendo flexibilidad y respuesta inmediata para amoldar el proyecto y su desarrollo a las circunstancias específicas que se están demandando en el entorno a fin de conseguir una reducción de costes de implementación y un considerable aumento de la productividad.
Agile es una metodología en la que se hace partícipe al cliente de los logros y progresos del proyecto a fin de contar con toda su experiencia y conocimiento del producto (algo sumamente positivo de cara a alcanzar los objetivos deseados).
Adicionalmente este tipo de metodologías ágiles ayudan a mejorar la motivación e implicación de los equipos de trabajo ya que permiten a todos los miembros del equipo conocer el estado del proyecto en cualquier momento, aceptar o rechazar propuestas y decisiones, etc.

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Transformación de la Gestión de Productos: El Poder del Design Thinking

El Design Thinking se está extendiendo como una metodología poderosa que está transformando la forma en que se gestiona el desarrollo de productos. Esta va más allá de simplemente crear productos visualmente atractivos; se trata de un enfoque holístico que prioriza las necesidades del usuario, la creatividad y la colaboración para generar soluciones verdaderamente innovadoras. Por eso resulta importante entender cómo las empresas pueden aprovechar esta metodología para lograr el éxito en un mercado en constante evolución.

¿Qué es el Design Thinking?

El Design Thinking es una metodología centrada en el ser humano que se basa en la empatía, la experimentación y la iteración continua. A diferencia de los enfoques tradicionales de gestión de productos, que a menudo se centran en la eficiencia y la rentabilidad, el Design Thinking se enfoca en comprender profundamente las necesidades y deseos de los usuarios para crear soluciones significativas. Esta metodología se compone de varias etapas interconectadas:

.Empatizar: Comprender las necesidades y perspectivas de los usuarios mediante la observación directa, entrevistas y otras técnicas de investigación cualitativa.

.Definir: Refinar y definir claramente el problema o desafío a resolver, basado en los conocimientos obtenidos en la etapa de empatía.

.Idear: Generar una amplia variedad de ideas creativas para abordar el problema, fomentando la colaboración y la diversidad de pensamiento.

.Prototipar: Crear prototipos tangibles de las soluciones propuestas para ponerlas a prueba y obtener retroalimentación temprana de los usuarios.

.Probar: Evaluar los prototipos con usuarios reales, identificar áreas de mejora y realizar iteraciones hasta llegar a una solución óptima.

Transformando la Gestión de Productos

El Design Thinking está transformando la gestión de productos de varias maneras:

.Enfoque en el usuario: El usuario se encuentra en el centro de cada etapa del proceso. Comprender sus necesidades, deseos y comportamientos permite a las empresas crear productos que realmente resuelvan problemas y generen valor.

.Creatividad e Innovación: La metodología fomenta la generación de ideas creativas y fuera de lo convencional. Al alentar la experimentación y la toma de riesgos controlados, se abren nuevas posibilidades para la innovación.

.Colaboración Interdisciplinaria: El Design Thinking reúne a equipos multidisciplinarios que aportan diversas perspectivas y habilidades. Esta colaboración estimula el intercambio de ideas y conocimientos, enriqueciendo el proceso de desarrollo del producto.

.Reducción del Riesgo: Al crear prototipos y probar iterativamente, las empresas pueden identificar problemas potenciales y realizar ajustes antes de invertir recursos significativos en la implementación completa de un producto.

.Adaptabilidad: La naturaleza iterativa del Design Thinking permite a las empresas adaptarse rápidamente a los cambios en el mercado y a las necesidades cambiantes de los usuarios.

En un entorno empresarial cada vez más competitivo y en constante evolución, el Design Thinking emerge como una herramienta esencial para transformar la gestión de productos. Al poner al usuario en el centro y fomentar la colaboración, la creatividad y la adaptabilidad, esta metodología impulsa la creación de soluciones innovadoras y significativas. Las empresas que abrazan el Design Thinking pueden mejorar sus procesos de desarrollo de productos, aumentar la satisfacción del cliente y lograr un mayor éxito en el mercado global.

Las 5 etapas para el desarrollo de producto

Pensar en un nuevo producto dentro de una compañía puede ser un gran desafío por todas las etapas que debe pasar, pero también por la incertidumbre de saber si tendrá éxito. Por eso es muy importante seguir todos los pasos para el desarrollo del producto y no fallar en el intento. Hay que hacer una hoja de ruta donde quede claro los equipos que estarán involucrados y sus responsabilidades.
Un punto determinante en el proceso es hacer las investigaciones necesarias para saber si es que este producto tendrá éxito.
Utilizar un creador de líneas de tiempo también puede ser muy útil durante este proceso, ya que permitirá ver de manera gráfica cuáles son los plazos que se están determinando para obtener el punto final.
En total, hemos separado este proceso en 5 etapas para que puedan organizar de manera clara este proceso.
1.Idea y oportunidad en el mercado
El primer paso siempre es el que guía todo el proceso. Por eso es vital que la idea esté clara para que sea el faro que ilumina todo el camino. Aquí en muchos casos lo que se hace es realizar una lluvia de ideas o brainstorming para idear lo que será el producto final.
2.Definir el producto
Después de haber generado varias ideas dentro del brainstorming, llegó el momento de definir el producto que se va a producir. Ya con el concepto final, se busca tener ahora la estrategia correcta.
Además, hay que definir el valor diferencial que va a tener el producto y para ello puede ser muy útil un estudio de mercado donde se defina claramente cuál va a ser su plus.
3.Crear el prototipo
Cuando ya se tiene la idea decidida y se ha visto el ámbito de negocio, el siguiente paso es tener el prototipo para ver los problemas que se podría tener en la producción y documentar todos los pasos que se han hecho.
Esto también ayuda a desarrollar un cronograma con las etapas que debe pasar el producto para tener una mejor planificación.
4.Validación del producto
Para saber que todo está funcionando como debería, la etapa de validación es clave. Esto significa probar el producto y saber que cumple con las características que se está ofreciendo. Estas pruebas al prototipo puede ayudar a saber si es que el 100% de las especificaciones funcionan, de lo contrario se tendrán que hacer modificaciones.
5.Lanzamiento del producto
Tras la validación del prototipo, el producto está listo para ser lanzado al mercado. Es también vital saber que todo lo que implica el ecommerce (en el caso de ser necesario) está funcionando sin problemas. Con el producto lanzado, hay que ver luego los resultados alcanzados y ver si es que hay que hacer mejorasen algunos de los pasos realizados.
Como hemos podido revisar, siguiendo estas etapas para el desarrollo del producto dentro de tu compañía puedes tener éxito para cambiar el mercado.

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Diferencias entre Prototipo y Producto Mínimo Viable (MVP)

Estos son dos de esos conceptos que escuchamos mucho en este ámbito marketiniano pero que quizás no tenemos claras las diferencias. Así que, vamos a empezar por definir prototipo.
Prototipo hace referencia a una simulación del producto o servicio que se está desarrollando.
Se utiliza para identificar el valor percibido del usuario, así como el desperdicio, para poder llevar a cabo los ajustes necesarios. El prototipo no tiene porqué ser capaz de cumplir con todas las funciones previstas en el producto final.
Y ahora, definamos Producto Mínimo Viable (MVP)
Se trata de una versión del producto o servicio que tiene las características y funcionalidades esenciales para satisfacer las necesidades del cliente y resolver el reto o problema que se quiere abordar.
El MVP debe ser lo suficientemente funcional para ser utilizado por los usuarios finales. También tiene que ofrecer valor real, confirmando o descartando las hipótesis acerca de la propuesta de valor.
Como conclusión, marcamos las diferencias entre ambos conceptos
.El objetivo del prototipo es probar y validar el producto o servicio antes del lanzamiento. El objetivo del MVP es obtener comentarios de los clientes y validar el valor del producto en el mercado.
.El prototipo puede no ser funcional y pueden faltar características importantes. El MVP debe ser lo suficientemente funcional para ser utilizado por los usuarios finales en un contexto real.
.Un prototipo es una versión muy temprana del producto. Un MVP es una versión más completa y se enfoca en la funcionalidad y el valor esencial para los usuarios.
.Un prototipo se utiliza para identificar oportunidades y realizar ajustes basados en información cualitativa. Un MVP se utiliza para obtener comentarios de los clientes e información cuantitativa, además de realizar ajustes para mejorar la funcionalidad y el valor.

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Product manager y product market fit

Los product managers o directores de producto son quienes crean estrategias para construir productos, supervisan la ejecución de estos productos y hacen el seguimiento de la reacción de los usuarios ante el producto.
Resumidamente, los directores de producto tienen la responsabilidad de identificar las necesidades de los consumidores y satisfacerlas a través del desarrollo y entrega de productos. Todo el proceso incluye desde la investigación del producto hasta el plan de marketing. Por ello, el director de producto trabaja transversalmente con diversos departamentos de la organización.
Funciones del product manager
Las funciones principales del product manager son:
.Identificar qué problemas y necesidades tiene el consumidor para saber qué productos crear.
.Garantizar que los productos se creen y se entreguen correctamente.
.Analizar cómo responden los usuarios a dichos productos y obtener ideas para su mejora continua.
.Optimizar los procesos anteriores e identificar constantemente puntos de mejora en los diferentes procesos.
.Definir una visión para el producto y una hoja de ruta calendarizada para testar el valor con el mercado.
.Analizar periódicamente las necesidades de los usuarios para mejorar la entrega de valor. Esto a través de metodologías tanto cualitativas como cuantitativas.
.Analizar las macrotendencias de su sector y tendencias en la tipología de producto para tener una solución actualizada.
.Coordinar y monitorizar la percepción de la marca y del producto por los diferentes segmentos de clientes.
.Priorizar las funcionalidades del producto traduciéndolo a ROI. Es decir, se priorizarán aquellas funcionalidades que generen un mayor retorno en las cuentas de la empresa.
Product market fit es el proceso de ajustar el producto en el mercado y evaluar la rentabilidad empresarial, sabiendo si el producto cumple con las necesidades del público.
Este proceso incluye la etapa de validación de los clientes potenciales, estudiando la posible reacción positiva y las estrategias de ventas posteriores.
Se basa en tres ideas:
.Un cliente dispuesto a pagar por tu servicio o producto.
.Lo que te cuesta conseguir tener el producto acabado es menor de lo que vas a recibir por él.
.Comprobar que el mercado está receptivo a nuestra idea de negocio y puede ser rentable.
Optimizar el product market fit es una de las tareas relevantes de un product manager, ya que significa que el producto se ajusta perfectamente a las necesidades y deseos del mercado objetivo.
El product market fit consta de dos etapas. Primero hablamos del customer discovery, que incluye reflexiones, análisis y la elección del tipo de cliente que se busca. Después se pasa a la etapa de customer validation, tiempo en que se produce el encaje entre cliente y producto, se empieza a vender y el volumen de negocio crece paulatinamente.
En resumen, el trabajo estratégico del product manager ayuda a lograr los objetivos del producto, supervisa la eficiencia del equipo técnico y coordina la organización, los clientes externos y los usuarios finales; todo ello con el objetivo final de lograr empresas más competitivas.

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Metodología Lean Startup: enseñanzas empíricas

La metodología Lean Startup se ha convertido rápidamente en uno de los métodos de innovación y emprendimiento más comunes utilizados por empresas, aceleradoras de startups y diseñadores de políticas de innovación y emprendimiento. Por desgracia, se ha se ha presentado como una solución única para todos, mientras sus supuestos clave se han sometido a escasas pruebas empíricas rigurosas y se ha ignorado la posibilidad de que existan condiciones límite críticas.
La racionalidad limitada -información y tiempo finitos- hace que las empresas jóvenes sean tomadoras de decisiones imperfectas. Falta demasiada información relevante y conseguirla requiere tiempo y esfuerzo. Para abordar este problema y reducir la incertidumbre sobre la viabilidad de sus negocios, se anima a los emprendedores a iterar sus ideas de negocio utilizando métodos de «aprender pensando» y «aprender haciendo».
En ese sentido, la metodología Lean Startup tiene como objetivo ayudar a los equipos en fase inicial a iterar ideas de negocio hasta que sean capaces de tomar decisiones más robustas. Las características significativas del método son la formulación de hipótesis de la idea de negocio y sondear cada hipótesis entrevistando a clientes y otras partes interesadas.
Es importante entender que simplemente formular hipótesis no es lo central. De hecho, los equipos que formulan más hipótesis realizan menos comprobaciones de éstas. Una posible razón es que una hipótesis concreta y bien formulada es mucho más útil que sondear muchas otras hipótesis vagas y mal formuladas.
Por otra parte, es preciso examinar las condiciones de borde de la metodología. La creencia de que los equipos debieran revisar sus ideas en las primeras etapas en respuesta a la información del mercado (por ejemplo, entrevistas con clientes) contrasta fuertemente con la descripción en investigaciones recientes de algunos fundadores como reacios a cambiar sus ideas originales, incluso cuando la información externa así lo prescriba.
Hay diferencias en la forma en que los distintos tipos de equipos abordan la formulación de hipótesis en base a su formación educacional. Por ejemplo, descubrimos que los equipos que tienen a alguien con un MBA tienden a formular menos hipótesis, a entrevistar a menos potenciales clientes, y a converger más lento hacia una idea concreta. Una posible explicación de este fenómeno es que personas con un MBA piensan que, si han imaginado una idea de emprendimiento, piensan que no tiene falencias, y por lo tanto, no necesitan sondearla. Esta interpretación concuerda con la afinidad de los MBA por los métodos de aprender pensando, que son característicos de sus programas de estudio. Por el contrario, los equipos con diversidad educativa aceptan más la formulación de hipótesis y su sondeo.
Aunque la comunidad académica aún se encuentra en las primeras fases de comprensión del Lean Startup como método de aprendizaje práctico para la iniciativa empresarial, tiene potencial para ser un motor de la innovación y cambio en las organizaciones. Sin embargo, es fundamental tomar en cuenta las enseñanzas que nos ha dejado su aplicación empírica, así como las condiciones de borde existentes.

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Atención pymes: la clave del crecimiento está en el producto

Las pequeñas y medianas empresas, pymes, en todo el mundo son reconocidas como el motor de la economía y uno de los mayores desafíos que tienen de manera permanente es el crecimiento. Para ello, la clave está en el producto, el cual no solo debe ser sobresaliente, sino además tiene que transformarse en una ventaja competitiva, capaz de ser una pieza angular en el éxito de sus clientes.
En efecto, una estrategia de crecimiento liderada por el producto (PLG, como se le conoce por sus siglas en inglés) ha sido el secreto de diversas compañías que comenzaron como pymes: Hubspot, Calendly, Slack, Miro, Evernote, Shipify, entre otras. El factor común en su exitoso crecimiento se caracteriza por un producto robusto que entiende y conoce las problemáticas del cliente y enamora al usuario, al punto de que no puede dejar de seguir adelante en su día a día sin él.
Así, el producto es el que permite llegar al cliente y no al revés. Antes, las pymes tenían que salir a buscar a sus clientes en los tomadores de decisiones y convencerlos de sus bondades; hoy, lo que tienen que hacer es invertir en su producto, entregar pruebas gratuitas a los usuarios para que lo prueben, se den cuenta del tremendo valor que tienen en sus manos y lleven a la alta gerencia la exigencia de compra. De esa forma, el producto se convierte en la estrella que se encarga de la adquisición, conversión y expansión del negocio, porque llega al usuario final a resolver sus dolores.
Por lo anterior, la construcción de un producto potente tiene que partir por comprender lo que el cliente necesita y dárselo, sin mayor intromisión. En la actualidad, el usuario valora la autogestión, la facilidad de uso, el escalamiento y que su experiencia sea la mejor. También el onboarding, que ayuda al usuario en la operación, siendo el mismo producto el que guía a través de un paso a paso. Asimismo, el usuario privilegia el acompañamiento experto y la capacitación eficaz, idealmente con una academia moderna donde pueda validar sus conocimientos y certificarse, sin costos adicionales y de acuerdo a su propio ritmo.
Puede haber más, ciertamente. No obstante, todo esto lo que persigue es redundar en clientes más felices, más satisfechos e indudablemente, más leales, donde su éxito será la clave del crecimiento y escalamiento propio.

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Mejora la productividad con la metodología Agile

En tiempos donde, producto de la digitalización, los cambios son constantes y las tendencias efímeras, surge la necesidad de desarrollar sistemas o procedimientos que permitan adaptarse al acelerado ritmo en que nuestro mundo se va transformando. La respuesta a esto fue la metodología Agile.
Esta metodología vio la luz en 2001, tras la reunión de 17 CEOs de las principales compañías de software en Utah, quienes luego de compartir sus mejores prácticas, crearon el manifiesto Agile. En resumen, se trara de un modelo de mejora continua que tiene como finalidad satisfacer, tan pronto como sea posible, las cambiantes necesidades de los clientes. Para lograrlo, recurre a plazos cortos de entrega, el uso de equipos multidisciplinarios o simplicidad.
Beneficios de Agile
Si bien fue creado pensando en los desarrolladores de software, su uso se extendió a otras esferas de la vida debido a los beneficios que ofrece, entre los que destacan:
.Mayores índices de satisfacción del cliente
.Equipos más colaborativos y comprometidos
.Flujos de trabajo optimizados
.Más productividad
.Tiempos de respuesta más cortos
.Innovación continua
.Mejor respuesta al cambio
No te quedes atrás y utiliza la metodología Agile
Los beneficios de esta metodología son variados y significativos. Por esta razón debes considerar su aplicación en el día a día. Acciones como dejar a un lado las estructuras lineales y formar equipos multidisciplinarios son fundamentales. Al involucrar a todo el personal necesario desde un inicio se incorporan diferentes perspectivas que pueden ayudar a encontrar respuestas que otro colaborador, por contar con experiencia en otra área, no podría haber pensado.
Gestión de proyectos con la metodología Agile
La metodología Agile asegura que la mejor manera de comunicarse con el equipo es a través de encuentros frecuentes, pero contrario a las prácticas actuales, tienen que ser pensados de manera más eficiente.
Por ejemplo, algunos especialistas sugieren tener breves reuniones de 10 o 15 minutos diarias. Estas pueden ser al comienzo del día y en ellas todos los involucrados en un proyecto puedan compartir avances o retos puntuales con la finalidad de que todo el equipo esté enterado de los avances y, si es posible, colaboren en dar una solución a los problemas.
La realidad actual demanda dinamismo. Por esa razón, recurrir a metodologías como Agile están cobrando relevancia, pues contribuyen a mejorar la manera en que respondemos ante los cambios.

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Qué significa Product Market Fit y cómo lo aprovecha el Product Manager

¿Quieres saber cómo crear productos que sean un éxito en el mercado? Entonces debes conocer el concepto del Product Market Fit. Este término clave en el mundo del Product Management se refiere a la combinación perfecta entre el producto que ofreces y las necesidades y deseos de tu mercado objetivo.
¿Qué es Product-Market Fit?
Product Market Fit es el proceso de ajustar el producto en el mercado y poder evaluar la rentabilidad de la empresa sabiendo si el producto cumple justo con las necesidades de las personas. Se confirma cuando el proceso de validación de clientes comprueba que has localizado a un grupo de potenciales clientes y que reacciona de forma positiva a tu servicio o producto; ofreces algo que interesa de verdad a un grupo y lo empiezas a vender.
Se basa en tres conceptos:
.Un cliente dispuesto a pagar por tu servicio o producto.
.Lo que te cuesta conseguir tener el producto acabado es menor de lo que vas a recibir por él.
.Comprobar que el mercado está receptivo a nuestra idea de negocio y puede ser rentable.
Especialmente al iniciar una Startup, empresa o un proyecto de negocio es fundamental conseguir el Product Market Fit ya que sin él no se podrá hacer realidad.
¿Por qué es importante el Product Market Fit?
Lograr el Product Market Fit es uno de los mayores desafíos a los que se enfrentan los Product Managers. Pero, ¿por qué es tan importante lograr el Product Market Fit? En resumen, porque significa que tu producto se ajusta perfectamente a las necesidades y deseos de tu mercado objetivo. Aquí algunas razones adicionales:
.Reduce el riesgo de fracaso de tu producto y te ayuda a evitar costosos errores de desarrollo y marketing.
.Un producto que logra el Product Market Fit es más fácil de vender y de comercializar, lo que se traduce en mayores ganancias y una mayor satisfacción para tus clientes.
.Al entender claramente las necesidades y deseos de los clientes, los Product Managers pueden tomar decisiones informadas.
.Cuando un producto logra el Product Market Fit, es más probable que los clientes lo compren y lo recomienden a otros, lo que se traduce en mayores ganancias para la empresa.

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